¿Sabías que, mientras los locales de comida rápida retroceden, las cafeterías siguen creciendo?

Según datos de Placer.ai, las visitas a cadenas de café aumentaron un 2,8 % interanual durante el primer semestre de 2025, mientras que las hamburgueserías cayeron 1,7 % y los locales de sándwiches más de 3 %. Una cifra que confirma algo que muchos ya intuían: el café no es solo una bebida, es un hábito, un refugio y una experiencia que sigue siendo parte de la rutina diaria, incluso en tiempos difíciles para el sector gastronómico.

Un consumo que se defiende solo

A diferencia de otros formatos, el café mantiene una frecuencia de visita muy alta. Las personas lo asocian a rituales cotidianos (inicio de jornada, pausas laborales y encuentros breves), lo que asegura un flujo constante incluso cuando baja el consumo general.
Además, el ticket promedio accesible y la posibilidad de personalizar la experiencia (tipo de leche, sabor, intensidad, temperatura) hacen que el café siga siendo una indulgencia “permitida” en contextos de inflación o contención del gasto.

Un estudio de Allegra World Coffee Portal (2025) revela que los consumidores buscan cafeterías con identidad local, productos artesanales y una oferta complementaria de alimentos saludables o de rápida preparación. Esta combinación explica el auge de los coffee-to-go, micro-cafés de barrio y cafeterías boutique sin cocina, que priorizan el espacio de atención y la rapidez por sobre una infraestructura compleja.

Nuevas estrategias para tiempos distintos

El crecimiento del formato “sin cocina” no es casualidad. Muchas cafeterías enfrentan restricciones de patente, ventilación o espacio, lo que dificulta instalar el equipamiento tradicional. Sin embargo, gracias a los avances en tecnologías de cocción y conservación, hoy es posible ofrecer platos consistentes y de alta calidad sin un chef ni campanas extractoras.

Algunos casos ilustran este cambio:

• Cadenas regionales en EE. UU. incorporaron productos ready-to-serve en sus vitrinas, elevando en un 12 % su ticket promedio por cliente.
• En Europa, micro-cafés urbanos están incluyendo sopas, bowls o sándwiches calientes regenerados en pocos minutos, extendiendo el consumo más allá de la mañana.
• En Chile, varias cafeterías de barrio han comenzado a ofrecer almuerzos ligeros o preparaciones “caseras” listas para calentar, aumentando la ocupación en horarios valle.

El patrón es claro: no se apunta a hacer más, sino a hacerlo mejor y con menos recursos.
Las cafeterías que logren mantener su esencia (un buen café, un servicio cálido y una propuesta coherente) y a la vez amplíen su oferta con soluciones prácticas, serán las que capitalicen este crecimiento.

eCook: la cocina detrás del mostrador

En este escenario, eCook se ha convertido en el aliado natural de las cafeterías sin cocina.
Cuenta con platos preparados mediante procesos Sous Vide y Cook & Chill, en envases HDPE certificados, se regeneran en agua hirviendo en solo 8 minutos y pueden servirse en menos de un minuto, sin extractor ni personal especializado.

Con un catálogo que abarca desde sopas y cremas hasta guisos, quiches, proteínas y acompañamientos, eCook permite ofrecer preparaciones de calidad casera, sin alterar la operación ni el espacio de tu local. Además, su equipo entrega asesoría y soporte permanente, ayudando a estandarizar procesos.

¿Quieres probar cómo podría funcionar en tu cafetería?
Agenda una degustación y descubre cómo eCook puede ser tu cocina silenciosa, siempre lista para servir.